Tokyo, es la capital de Japón. Es una ciudad fascinante en la que uno puede pasar desde días, una semana a un mes.. y más también, sin necesidad de aburrirte. Es una ciudad con contrastes, donde se encuentran enormes rascacielos y centros comerciales hasta templos antiguos que enseñan la verdadera cultura japonesa.
Hoy queremos compartirte un viaje a la capital japonesa, contada por un gran amigo.
Un relato especial por Tokyo
Tokyo por: Nicolás Luengo
Mi primera experiencia o mejor dicho mi primer viaje desde mi tierra natal, Chile, fue a un lugar mágico lleno de historia y emociones por doquier, ese fue Tokyo, Japón
Todo comenzó con querer viajar por primera vez . El destino elegido fue Tokyo, por ser mi país favorito debido a su cultura. Sé que está al otro lado del mundo (demoré 34 horas de viaje en llegar), pero ahora que puedo contar mi experiencia, es lo mejor que pude haber hecho.
Antes unos consejos: saber inglés es fundamental. Aunque ellos no lo hablan, en las zonas turísticas sí, aunque sea algunas palabras. Por mi parte, es ideal aprender aunque sea lo más básico de japonés. Ellos valoran mucho eso y les es más fácil ayudarte, si hablás un poquito de su idioma.
Al llegar al aeropuerto de Narita debes tomar el tren con destino a TOKYO, estación Ueno. Al momento de ver las líneas de metro, quedarás sorprendido por sus más de 100 líneas y colores, pero claro, no se puede esperar menos de un país tan desarrollado como éste.
Fueron 45 minutos en tren de noche, pero a medida que se acerca a la ciudad, comenzas a apreciar las luces de una magnífica ciudad cultural y tecnológica. «Uff sí, he llegado a Tokyo». Al salir del vagón y caminar hacia la salida ya estaba perdido, pero feliz y sorprendido porque todo lo que había leído y escuchado de esta ciudad no era nada comparado con lo que veía con mis propios ojos. Asombroso era poco.
Después de conseguir ayuda, me dirigí a mi hotel caminando. Era un hotel cápsula, los más económicos pero cómodos y acogedores. Luego, decidí salir a caminar emocionado, por esas calles llenas de cultura y llegué al TOKYO-SKYTEE, un mirador de 400 metros de altura, que se ve desde casi todas partes. Era mi primera postal.
La mañana siguiente, recorrí templos, jardines, y conocí personas amables y simpáticas que con un konnichiwa (hola), te saludan ayudados con una pequeña inclinación del cuerpo.
Visitar el templo Asakusa es indispensable. Es uno de los templos más grandes y concurridos de la ciudad y se encuentra en pleno centro. Sus grandes demonios que lo custodian, me dejaron asombrado. Visitar el castillo imperial en la prefectura de Tokyo, el barrio de Akihabara o el barrio electrónico donde encontrarás de todo relacionado a la cultura j-pop y anime, tomarse un café con las mey café ( chicas disfrazadas de cosplay) o un karaoke, son unas de las tantas cosas que puedes y debes hacer. Viajar a unos 20 minutos en tren y llegar a Odaida, donde se encuentra el edificio de la tv de Tokyo, uno de los más reconocidos por su forma, el Gundam Wing gigante, entre otras cosas.
Debes saber que todo lo relacionan con sus series de anime y manga. La torre de Tokyo, es unos de los atractivos que no puedes dejar pasar. Asombrosa por donde se le mire. El famoso cruce de shibuya, el más concurrido del mundo, es sin duda una cosa que me dejo impresionado, al igual que el famoso perro Hachiko esperando a su amo.
Sin duda Tokyo es una ciudad mágica que habiendo estado 24 días, aun me falta por conocer.
Definitivamente si me preguntan cuál seria mi lugar para vivir, elegiría Tokyo.
Creo que todos los viajeros deben conocer esta ciudad por todo lo que hay para ver y hacer y te aseguro que aún recorriéndola, te sorprenderás aún más.
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